sábado, enero 25, 2014

¿Está Ecuador preparado ante el retiro de mallas de los escenarios deportivos?

La realidad no.

Sin duda es un buen punto el retirar dichas mallas en los lugares mencionados (que se sabe se lo hará poco a poco), pero dentro del imaginario deportivo (y futbolístico), el ecuatoriano no está en las condiciones culturales para este proceso, debido a factores diferentes: sentido de pertenencia, aprecio al deporte y, sobre todo, corresponsabilizarse ante los actos u omisiones dentro de dichos escenarios.

Bien es sabido que las hinchadas de determinados clubes (no todos los clubes del país tienen hinchadas, con la propiedad que esta amerita), y responden a un factor momentáneo que los vincula al club solo por el mismo, es decir, solo se apegan al resultado y el mismo puede ser causal para el apoyo al que, en fondo, deberían estar apegados por sentido de pertenencia, pero el arraigo social del fútbol en el Ecuador solo se alinea por la lógica futbolera, más no futbolizada: cuando se menciona la segunda, se habla de un componente más profundo, donde hábitos y costumbres de una sociedad están plenamente identificados con dicho deporte y la estructura de varios escenarios está medido por este aspecto (incluyendo el político), lo cual no ocurre en el Ecuador, ya que solo es futbolero y solo se manifiesta en dicho sentido por aspectos netamente puntuales como resultados y posiciones de los clubes, nada más.

El retiro de las mallas implica un alto costo de sentido de pertenencia que el Ecuador no está preparado, y, agregando que la gran mayoría de personas que asisten a los escenarios deportivos para presenciar el fútbol solo lo hacen por aspectos de marcadores (muy generalmente), el resultado es que el fútbol como deporte no ha dado el "plus" más relevante que una Cultura en este sentido debe conllevar, que es el aprecio al mismo.

¿Se imaginan, por ejemplo, un Clásico del Astillero, donde ambos equipos estén peleando en las primeras posiciones o un partido entre dos clubes que puedan ocupar un sitial de preferencia y no exista el debido control del caso? Las cámaras de vídeo (y está demostrado), no cumplen al 100% de efectividad en el control de la violencia que se está germinando en algunos escenarios deportivos, puede conllevar a un gran problema y las autoridades pueden quedar mal al no poder identificar el verdadero origen del problemas, es más, ¿las "hinchadas"  responden a todo el conjunto de personas que son seguidoras de un club? Muy negativo es que determinadas instituciones se reúnan en pos de una "Cultura de paz", cuando no hay garantía real de que con quienes se reúnan sean realmente legítimos representantes de una mayoría, si van en nombre de su agrupación, es legítima, sin embargo, ellos también responden a intereses, los mismos que no tienen algo que ver con el asistir a un evento deportivo.

El retirar las mallas de los escenarios deportivos implica un plan previo, por ejemplo, la personalización de las entradas al público en general (incluyendo hinchadas), las mismas que pueden expedirse con la presentación de la cédula de identidad y que pueden solucionar una serie de problemas y mostrar una serie de aspectos como: 

  • -          reventa de entradas,
  • -          localización exacta de una o  varias personas de acuerdo a su ubicación en el escenario deportivo ante un actos delictivo,
  • -          conocer el real promedio de asistencia de personas y la cantidad de veces que va una persona a un escenario deportivo,
  • -          ayudar al club en el aporte constante de ingreso (sea cual sea su status diferenciado)...

Espero que mis apreciaciones sobre el escenario provisto con respecto al Clásico del Astillero (como ejemplo base), sea solo un imaginario.

jueves, agosto 29, 2013

La oportunidad de Francisco: cuando un "demonio" llamado amor vence todo.

La noticia ha generado movimiento intenso en varias redes sociales: cura brasileño dejará hábito por novia a la que embarazó no solo que puede consternar "a más de uno" (claro, desde la mira conservadora), sino que tiene un tinte especial y dada la poca connotación que generó en su momento lo de Cutié no debe llamar la atención esto, pero lo particular del caso es la que podría ser la papa caliente que le puede llegar a Francisco en momentos claves de la Iglesia Católica y su feligresía, que espera un cambio con tinte progresista que se tenga la sutileza y perspicacia necesaria de adaptarse a los nuevos tiempos: desde el abandono edictal del celibato hasta reconocer su poca inacción  manifiesta frente a casos de pederastia de sus clérigos.

Este caso no puede pasar desapercibido por esa causal acción que nace del más bello sentimiento humano que es el amor, como el mismo cura lo expresó "con el tiempo fuimos observando que nuestra amistad tenía algo más: el amor, pero siempre buscamos dejarlo solo en el nivel de amistad. También  decía que si no conseguía mantener el celibato, dejaría antes el ministerio”, a lo cual prosigue con sinceridad notable "Pero, por ironía del destino, no sucedió como yo pensaba y nos involucramos concretamente y hoy ella está embarazada y yo quiero asumir la paternidad plenamente". Esto es un pleno reconocimiento de su propia sensibilidad si dejar de lado su naturaleza objetiva, que en un principio fue la de ser cura, y los hábitos los deja por ese principio de paternidad que lo encarara muy seguramente con responsabilidad.

¿Pero por qué la papa caliente a Francisco? Como se escribe, la tibieza que ha asumido con respecto al tema de los acusados de pederastia y la nula palabra que tiene  en su vocabulario el fin del celibato no hacen más que alejar esa figura inicial (dada por los medios de información), de un Papa progresista y apegado a la nueva era de jóvenes que abogan por un cambio real que se apegue al diario vivir, sí, ese diario que lo obliga a dar un paso al frente de la evolución dentro de la institución que el comanda, porque es innegable que los hechos que se dan alejen de la realidad cognitiva que implica dichos derroteros, salvo que, por intereses, lo más fácil es evadir el problema real y siga en lo suyo.


Ojalá esto sea un aviso para lo que pueda realizarse.

jueves, marzo 28, 2013

Ecuador: el "fuera Rueda" como timonel de fortaleza.


Y este #FueraRueda, una cábala muy efectiva.

Y denota cierta agresividad en una manera específica del comportamiento del ecuatoriano, que admira, a su manera, el trabajo que se mantiene en la selección, sin dejar de lado que, por más buenos elementos que se tenga, se necesita el temple y las cualidades necesarias para cohesionar un equipo y esto es lo que ha logrado la selección, que se mantiene firme en la segunda posición una vez  finalizada la jornada por eliminatorias.

También se destaca que el equipo ecuatoriano, a diferencia de anteriores, ya no depende de un hilo conductor o de dos figuras: ahora es todo una estructura bien forjada que desempeña de manera eficaz su trabajo. En la vida, como en cualquier campo, el trabajo de equipo siempre sabe tener como guía los resultados. Y esto es lo que se observa en la selección.

Ahora viene el reto de entrar de manera firme al top ten (palabras del mismo Rueda), y lo hará con un grande del mundo, con la "Die Mannschaft", la tres veces ganadora del mundo y considerada en estos momentos como la primera candidata seria en ganar el Mundial en Brasil si llega a la cita ecuménica. Pero esto es sin duda un aliciente más para  que la "Tri" haga lo suyo: demuestre el porque está en dichas posiciones. 

Los y las ecuatorian@s hacen los suyo: "apoyar" con su "fuera Rueda" el trabajo que se sigue realizando.